La Pachamama

img1
img2
img3
img4
img5
img6
img7

Hoy es un día especial en los Andes, ya que se celebra el primer día del nuevo ciclo andino. Cada primer día de agosto, se realizan una serie de ceremonias y rituales destinados especialmente a agradecer a la Pachamama o Madre tierra.
Es así que, la Pachamama es el todo, es decir, en ella existen todos los seres vivos, desde el agua, montañas, animales y el ser humano, en una permanente relación de reciprocidad, intercambio, correspondencia y complementariedad dentro de un ciclo circular. Así, se asume que la Pachamama incluye a los tres mundos: Hanan, pacha y kay pacha y al mismo tiempo las dualidades de materia y espíritu, mujer y varón, vida y muerte en un permanente yanantin.
Como parte de la cosmovisión andina, se considera que durante este periodo la Pachamama está abierta y con hambre, por lo que se le debe realizar ofrendas que sean de su agrado con el fin de no solo satisfacerla, sino para que también nos colme de abundancia en alimentos, regalos y un buen inicio del ciclo agrícola. 
Esta forma de entender y asumirse en el universo hace que el hombre andino tenga un profundo respeto por la Pachamama, a la que además de hacer ofrendas se la representa como ente vivo, pensante y protector, siendo representada en el imaginario popular de distintas formas. Así, tenemos varias obras de los artistas tradicionales que nos muestran este sentir, amor y agradecimiento a la Madre tierra.
En Ruraq maki, hecho a mano encontrarás diversas obras alusivas a nuestra Pachamama.